Si observamos las máquinas de envasado de la industria alimentaria, la mayoría utilizan una rasqueta en el embudo para garantizar el flujo constante del producto, como carne o carne picada. La rasqueta normalmente está hecha del material termoplástico TECAFORM AH natural, un acetal de grado alimentario con una gran rigidez y un buen comportamiento de desgaste en contacto con el acero inoxidable.
Pero en ocasiones la rasqueta se puede romper si la carga es inesperadamente alta. Como los procesos están automatizados, muchas veces se tarda en detectar estos daños. Si los alimentos resultan contaminados con plástico, hay que tirar todo el lote entero de producción, ya que los alimentos han quedado dañados.